Recordando a Platón
El Universo contempla su alma.
Y desea ser contemplado como él contempla su alma.
El motivo crea el universo.
El objetivo es crear un ser capaz de contemplar el motivo y recordar su naturaleza.
Este ser tiene la posibilidad de contemplar el Alma del Universo
Relación Idea- Alma: Contemplación
Relación cuerpo-cosas: Percepción
Relación entre mundos: Hipóstasis
Mundo inteligible ALMA contemplación IDEA
Hipóstasis Encarnación física
Olvido: ¿Qué olvido?
Mundo sensible CUERPO percepción COSAS
El cuerpo se da cuenta de su sensibilidad al percibir ésta en las cosas.
Y se reconoce como algo más que un cuerpo físico. Empieza a recordar.
La Idea se manifiesta en todas las cosas a través de la hipóstasis.
El símbolo de la Idea es el alma, su contemplación.
El ser vivo olvida la Idea en su encarnación del Alma, el cuerpo, su estado físico.
La percepción de las cosas, su sensibilidad, devuelve el recuerdo al cuerpo.
El reconocimiento es quién trae el recuerdo de su raíz.
El cuerpo, lo físico, reconoce su estado original; en el momento solo es un instante de luz, una visión,
pues el cuerpo a de ser capaz de, ya no solo percibir la sensibilidad sino también de ver su naturaleza,
el Alma del universo a quién pertenece, y la Idea de éste, su esencia.
El cuerpo, según percibe de las cosas obtiene más posibilidades de recordar,
y son estas posibilidades las que hacen surgir las preguntas: ¿Qué recordar? ¿Quién recordar?
La sensibilidad denota inteligencia en la observación, lo bello de la estética en el movimiento, incluso con el paso del tiempo.
La posibilidad de que sea el instante la respuesta son pocas, porque hay infinidad de instantes.
Sin embargo, la posibilidad está en el instante, es el momento de recordar, no es otro.
El sujeto es quién tiene la posibilidad, es el ser vivo.
¿Quién de los sujetos?
Quién además de razón tenga capacidad de razonamiento.
Este sujeto con capacidad de razonar aplicará su voluntad en la comunicación con todas las cosas que le atraen, y con todas las cosas que le repelen.
Será su capacidad de razonar quién crea la necesidad de utilizarla instantáneamente, a él y su especie.
Esta capacidad traerá el reconocimiento de la causa y efecto, de la percepción existente en el mundo sensible de las cosas, y del suyo propio en el tiempo.
El sujeto capaz lo distingue, distingue los efectos de causas exteriores, y cuando surgen los efectos de causas interiores.
Cuando el sujeto con capacidad de razonar existe, existe una familia que como él tiene esta capacidad.
Con la razón se nace y el razonar correctamente ha de ser enseñado, permite relacionarse con los demás, y con las demás cosas.
En el transcurso de la vida se percibe el “don”, se reconoce parte de la Idea y su universalidad.
Las cosas y animales de su alrededor son tan efímeras como él, no existieron en el pasado y no existirán en el futuro.
El primer entendimiento al razonar provocó entusiasmo por las cosas y el sujeto cambió para evolucionar, conjuntamente con su alrededor.
La vida es maravillosa, la vida es una gratificación.
Sin vida la Idea continuaría siendo bella, mas nadie tendría la gracia de saberlo.
Sin embargo la vida es parte de la Idea, y va a seguir dando la oportunidad en su creación y procreación
del sujeto capaz de observar y observarse, requisito para ver más allá de lo razonado.
La sensibilidad puso en jaque la estabilidad de las cosas en su ser.
Diseñó la intuición, y con ella la capacidad de la razón sin necesidad de utilizarla, o sea, sin razonamiento.
Es un don: la deducción instantánea.
De esta manera la razón está en sustancia y esencia en los seres vivos.
El propio universo que contemplamos es una parte de la Idea.
La Idea, que no es el universo, quiere ser contemplada como lo es el universo por ella. Solo el universo tiene la llave para hacer realidad estos deseos, y ha de crear una familia de seres que, pudiendo ver una parte de la Idea cada vez, fuese fotografiando sus partes para ser contempladas por seres venideros, futuras generaciones.
Hasta que el tiempo les permita visualizar la IDEA completa.
No puedo decir ahora que
solo se que no sé nada.
Porque, sí se lo que no se.
Este Instinto del saber busca lo mismo, Saber,
su contrario es lo primero que se encuentra en la búsqueda..
Es el encuentro o acontecimiento de averiguar lo que no se sabe.
El Saber siempre busca el lado positivo en el Acontecimiento de Encontrar.
Para hablar de SER ha de quedar establecido que se dejará de nombrar la palabra,
en cuanto se conozca su estadio en la oración.
Así en un primer termino habrá de nombrarse ésta una y las veces que sean hasta encontrar el ser en algún lugar.
Ser es ahora un Lugar. Un saber.
Todo lo que existe tiene un lugar.
Este Universo tiene vida.
Por lo que la vida como el Universo tiene un mínimo de 3 Elementos Principales.
Uno.
Un primer elemento que sabemos que no es nada pero es inamovible;
y entendemos su quietud.
Dos.
Otro elemento es totalmente inquieto en su principio.
Tres.
Estos dos principios unidos, es y son el Lugar.
Del lugar se obtiene un saber estar, ser estar.
El lugar de encuentro y de unión a la vez, entre ellos, es lo que define este Lugar, y el aspecto que lo ocupa.
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