El
"LAM-RIM" es un aspecto esencialmente profundo del Dharma por ser una
tradición pura desde su origen.
No
tiene falta u omisión alguna, ya que es una práctica completa, en la que los
aspectos del método y la sabiduría del camino se encuentran perfectamente
unidos.
Provee
todos los niveles y grados de las técnicas de sus antepasados de la misma
naturaleza y origen, desde las prácticas para los principiantes hasta la
practica final anterior a la iluminación completa (el estado de la
no-practica).
Las
leyes fundamentales del Dharma fueron trasmitidas en sus comienzos divididos en
dos enseñanzas: teóricas y prácticas.
Las
primeras fueron evolucionando con las observaciones de las simplezas vistas por
Buda.
Las
segundas pretendían poner en práctica las primeras lecciones pensadas.
Con
las dos formas de aprendizaje de las leyes de la naturaleza se obtenía la
visión de la "Iluminación".
Esto
es, entender la necesidad de practicar Dharma para despertar conciencia.
Cuando
despertamos conciencia empezamos a limpiar nuestra alma de impurezas,
adquiridas por culpa de nuestra ignorancia, y damos paso a nuestro espíritu que
se conserva puro, pues es nuestra verdadera esencia, al reconocer lo profundo
de nuestro ser reconocemos esta misma virtud en nuestros prójimos y sentiremos deseos
de ayudarles a que lo descubran también.
Según
la historia de cómo los discípulos de Buda enseñaron a los demás sus
pensamientos hasta convertirlos en escritura, se recuerdan tres nombres de
maestros con sus tres virtudes:
NAGARYUNA,
que enseñó mediante la disciplina que la ignorancia era el sufrimiento del
hombre.
ASANGA,
que enseñó mediante la meditación cuál era esa ignorancia, y por lo tanto el
sufrimiento.
Y
ATHISA, que reunió en escritura las dos enseñanzas convirtiéndolas en
sabiduría:
- Saber averiguar cuál era la
ignorancia que té hacia sufrir.
- Saber meditar el método
correcto para hacerla desaparecer.
Además,
enseñó algo nuevo, a que una vez te deshicieras de tu sufrimiento no volvieses
a tenerlo nunca más, convirtiéndote en maestro: enseñando a los demás nunca te
olvidarás de tu cometido en esta vida.
Así
que se escribió el LAM-RIM, para que todos los seres conscientes tuvieran la
oportunidad de ser felices por ellos mismos, colaborando con una sociedad portadora
del bien universal.
"TENIA
MIEDO DE LA MUERTE Y
POR
ESO ME FUI A LA MONTAÑA A MEDITAR
AHORA
QUE HE REALIZADO LA
NATURALEZA
ÚLTIMA DE LA MUERTE
YA
NO TENGO POR QUÉ TENER MIEDO"
El
Dharma es una enseñanza espiritual. Su cometido es enseñarle su espíritu
verdadero a cada individuo.
¿Qué
diferencia hay entre una persona que tenga desarrollado su espíritu y otra que
no?:
La
primera se beneficia a sí misma y beneficia a los demás como una expresión
espontanea de su estado, y desaparece el sufrimiento.
Una
persona no desarrollada espiritualmente solo aporta sufrimiento a sí misma y a
los demás.
El
Dharma está constituido por sus tres elementos más importantes, llamados
"las tres joyas":
- Los seres iluminados (Buda).
- Las enseñanzas (Dharma).
- La comunidad espiritual (La
Sanga).
La
primera enseñanza de nuestro espíritu es tomar refugio.
Buda
nos da las enseñanzas, pero son las enseñanzas el último refugio.
Es
el Dharma el que nos enseña, es el Dharma en quién tenemos que tomar refugio.
BUSCANDO
EL REFUGIO INTERIOR
Existe
el refugio de la Sanga: la comunidad de los aspirantes espirituales, la
asamblea de los practicantes que moran en los diversos estadios de la práctica
y la realización. Este es el refugio de los amigos espirituales.
El
Buda posee cuatro cualidades que hacen de él un objeto de refugio válido:
- Está libre de la imperfección
sansarica.
- Tiene la habilidad omnisciente
para enseñar el camino a la iluminación.
- Mora en la perfecta compasión
hacia todo ser sensible.
- Es ecuánime con todos.
La
Sanga, los amigos espirituales, poseen estas cuatro cualidades.
Y
en el Dharma está la capacidad de generar estas cuatro cualidades en nosotros.
El Dharma es el refugio de la "verdad".
Los
seres iluminados son los maestros del refugio, y la Sanga los amigos del
refugio.
El
Dharma tiene muchos niveles y tipos de doctrinas, estos se usan según las
características de los discípulos o estudiantes a los que van dirigidas.
Debemos
saber discernir por nosotros mismos lo que se debe interpretar literalmente de
lo que tiene un sentido figurado.
Nosotros
los occidentales tenemos una ventaja al respecto, por nuestro quehacer
cotidiano tratamos con muchas personas al cabo del día y podemos diferenciar
las variopintas formas de expresarse que tienen cada uno de ellos, y los
entendemos, más o menos, pero los entendemos; luego está la época en la que nos
ha tocado vivir, que tiene escrita toda la historia del hombre desde sus
comienzos, esto hace que sepamos diferenciar lo que aprendemos.
El
precepto principal del refugio es desarrollar la alerta sobre las leyes
kármicas. El Dharma es el agente que elimina el samsara, por eso se le llama
libre de deseo.
Aunque
la ignorancia es una aflicción más penetrante que el deseo, el deseo es la
fuerza que nos ata más directamente a la vida sansarica. El deseo es el agente
de karma.
La
función que proporciona el refugio en el Buda es la dirección espiritual, la
función del refugio en el Dharma es la práctica, y la función de la Sanga es la
ayuda espiritual.
Con
estas tres ayudas, uno posee todo lo que necesita para transcender los caminos
y los estadios, a través de las enseñanzas experimentadas en la práctica de los
tres refugios.
Estas
tres experiencias generan el estado superior con el que se obtiene la
liberación y la iluminación.
Las
enseñanzas experimentadas en la práctica de los tres refugios se pueden
aprender mejor todavía si además se medita sobre los dos niveles de la verdad:
Verdad última y verdad relativa.
Esta
meditación de la verdad sirve para comprender los pensamientos supremos de un
Buda. Comprendiendo y practicando una forma de pensar verdadera podemos
alcanzar la budeidad sin equivocarnos, y actuar correctamente según la única
verdad.
Sobre
las dos verdades decir que:
La
verdad última es la verdad inmediata.
La
verdad relativa es la verdad mediata, por eso se medita en segundo lugar, sirve
para averiguar si la primera verdad última, de la que estuviésemos hablando, es
verdad o no.
La
verdad relativa nos dice los motivos por los que una verdad es verdad, también
nos dice los motivos por los que una verdad es verdad a medias.
Y
como no, también nos explica por qué una verdad está equivocada en esos
momentos en los que hay que cambiar de actitud.
LAS
TRES ENSEÑANZAS MÁS IMPORTANTES DEL DHARMA
- La ley de la ecuanimidad.
- La motivación de la iluminación
de la Bodichita.
- La ley de la vacuidad.
AUTODISCIPLINA,
MEDITACIÓN, SABIDURIA. Son las tres actitudes primordiales del practicante del
Dharma.
Nuestra
relación con la práctica del Dharma debe estar basada en la razón y el sentido
común.
El
tema principal a estudiar ahora es la naturaleza de los dos niveles de verdad
que existen, y de los que hemos hablado anteriormente, cuyos estadios pueden
ser abordados a través de una combinación de:
ESCUCHAR,
CONTEMPLAR Y MEDITAR.
Razona
bien desde el principio y así nunca habrá necesidad de mirar hacia atrás con
confusión y duda.
Es
importante no querer ir más deprisa de lo que nuestra capacidad nos permite.
"CUANDO
ESTUDIO SIEMPRE CONTEMPLO Y MEDITO"
"CUANDO
CONTEMPLO TAMBIÉN ESTUDIO Y MEDITO"
"Y
SIEMPRE QUE MEDITO TAMBIÉN ESTUDIO Y CONTEMPLO"
Con
la meditación se provoca una causa, y ésta provoca un efecto, debemos
prepararnos para el efecto, ¡por eso meditamos!
EL
MANTENERSE PREPARADOS
La
naturaleza del nivel más sutil de la consciencia, que es pura y libre de
manchas, es algo que todos los seres conscientes poseemos.
En
este sentido todas las personas son iguales, todas compartimos la misma
situación y cuando se reúnan las condiciones correctas nuestra naturaleza
búdica evolucionará hacia la iluminación omnisciente.
Además
de tener la sabiduría y el conocimiento de las enseñanzas, debemos de tener
paciencia, y la esperanza para esperar la llegada de nuestro día, en el cual
conozcamos la naturaleza de la perfección completa.
Para
este día tenemos que estar preparados, avivando con nuestra vigilia los cinco
sentidos y comprender así su "efecto": El sexto sentido.
Este
culminará todos nuestros sacrificios, cuando se ponga en contacto con nosotros.
"MANTÉNTE
PURO Y NOBLE HASTA EL DÍA QUE YO ME PRESENTE A TI".
Cuando
se conoce el dharma uno se involucra en la práctica de las seis perfecciones:
Los cuatro modos de reunir discípulos y los dos estadios del Tantra.
Generosidad,
Moralidad, Paciencia, Perseverancia, Concentración, Sabiduría.
- La generosidad desarrolla la
mente que quiere dar.
- La moralidad o ética desarrolla
la mente que quiere abandonar la conducta incorrecta, la que daña a los
demás.
- La paciencia desarrolla una
mente que no quiere reaccionar cuando alguien nos daña.
- La perseverancia hace
desarrollar una mente gozosa que desea practicar Dharma con alegría y entusiasmo.
- La concentración nos mantiene
la mente enfocada en un punto: la práctica de la virtud. Al principio será
una virtud mundana, para convertirse en una virtud transcendental.
- La sabiduría es la culminación
de la mente, pudiendo discriminar entre el bien y el mal, entre las buenas
y las malas acciones. Es la que convierte los pensamientos en correctos
con la ayuda de la concentración.
¡Ya
estás en el camino de la iluminación, y no hay marcha atrás!
EL
"YO" SABIO ESTÁ DENTRO DE NOSOTROS
El
significado de las enseñanzas del Dharma se debe de concentrar en uno solo: En
crear la sabiduría dentro de nosotros y esperar que esta se haga existente por
sí sola fuera de nosotros, teniendo una vida independiente por sí sola.
Cuando
llegue el momento y seamos sabios, dejaremos de ser el yo y las circunstancias
para ser las circunstancias y nuestra sabiduría.
Cuando
nos preguntamos: ¿Quién soy yo? Nos podemos responder mirando a un espejo y
decir: Este soy yo, y será verdad, pero también somos lo que hay dentro de
nosotros.
Si
nos miramos una mano, vemos que la mano nos pertenece, pero la mano no es él
yo. También podemos pensar que nuestro cerebro es nuestro yo, porque es de ahí
de donde salen los pensamientos con los cuales nos sentimos vivos, pienso luego
existo. Pero el cerebro no podemos verlo, y sabemos que está ahí. Reconocer
nuestro yo verdadero empieza por darnos cuenta que lo que vemos en el espejo es
la funda de nuestro yo y podemos intentar ver nuestro cerebro igual que vemos
nuestra mano, esto es: controlar todo lo que piensa este.
Si
cerramos los ojos, después de haber hecho la relajación mental, podemos ver lo
que ha pensado nuestro cerebro anteriormente, también lo que piensa ahora, y
después lo que pensará en el futuro. Controlarlo sería decidir lo que se quiere
pensar en el futuro y no dejarlo al azar. Igual que para ser ecuánimes nos
ponemos en el lugar de los demás, aquí tenemos que ponernos en nuestro lugar,
el cual no está en nuestro cerebro, está fuera de éste, y así ver nuestros pensamientos
desde la perspectiva de los demás, ósea desde fuera.
No
es tan difícil como parece al principio, el ejemplo está en nuestra
respiración: ésta no la podemos ver, pero cuando meditamos escuchándola, la
sentimos tan fuerte y tan cerca que es como si la viésemos. Si conseguimos lo
mismo con nuestro yo interior, escuchándonos a nosotros mismos, entraremos en
lo que se llama estar en vigilia, dándonos cuenta de todos nuestros actos y así
poder corregir lo que no nos guste de nosotros, convirtiéndonos, moldeándonos,
para conseguir la perfección como ser humano.
Recordar
estos tres tipos de pensamiento: BURDO, SUTIL Y MUY SUTIL.
El
pensamiento burdo es cuando somos ignorantes, (espiritualmente hablando).
El
sutil es cuando alcanzamos el conocimiento de la luz, (despertar conciencia).
Y
el muy sutil es con el que recorremos el camino de la luz. Éste último es el
que se necesita el día en que nos llegue la muerte física, con él seremos
conscientes de nuestro paso a la próxima dimensión.
El
pensamiento sutil es el que nos prepara para este momento.
VISIÓN
Y CONTEMPLACIÓN HACIA EL MAESTRO
Un
buen estudiante de Dharma debe de tener estas tres cualidades fundamentales:
- SINCERIDAD
- INTELIGENCIA, ser capaz de
discriminar entre las fuerzas beneficiosas y las erróneas que hay en el
camino.
- ENTUSIASMO, un intenso deseo de
lograr la comprensión y las experiencias espirituales.
Meditando
en ellas se desarrollará una cuarta: Valorará el Dharma y el maestro del
Dharma.
"EL
BUDA NACIDO DE SÍ MISMO
ES
UN SER QUE HA PASADO A LA PERFECCIÓN
PERO
MAS BONDADOSO QUE EL BUDA
ES
EL PROPIO MAESTRO,
PORQUE
ÉL PERSONALMENTE
NOS
DÁ LAS ENSEÑANZAS ORALES"
La
raíz del desarrollo espiritual es cultivar una relación afectiva con un maestro.
Lo
que significa que debemos cultivar las actitudes correctas y después mostrarlas
adecuadamente en la acción, ósea en la práctica.
Ésta
es la raíz que si se hace fuerte soporta el tronco, las ramas, las hojas, y las
flores de la práctica.
Las
dos actitudes principales que deben cultivarse son: El respeto por el guru y el
aprecio por los beneficiosos efectos que trae a nuestra vida.
En
consecuencia, recibiremos la inspiración necesaria para practicar lo que él nos
enseña.
El
maestro debe ser capaz de impartir las enseñanzas sobre los dos estadios de la práctica,
de acuerdo con su propia experiencia personal.
Esencialmente
debe estar cualificado para dar la cuarta iniciación de su propia experiencia,
lo que significa introducir al discípulo en las grandes uniones de
adiestramiento, y más allá.
Un
maestro que otorga los cuatro niveles de iniciación debe de haber realizado la
luz clara simbólica y la real, así como el cuerpo ilusorio, que es el vehículo
de la mente de la luz clara. También debe de haber realizado el estado de la
gran unión en el que el discípulo es introducido.
Debe
de utilizar el respeto que se le muestra como un motivo para la práctica de la
humildad. Esta es la responsabilidad del maestro.
El
estudiante tiene la responsabilidad de utilizar la sabiduría aprendida
manifestando su fe y su respeto al maestro.
Es
tema de meditación estudiar Dharma para:
- No crear la motivación de
despreciar a los enemigos y proteger a los amigos.
- No crear la motivación de
obtener beneficio material.
- No crear la motivación de
impresionar a los demás.
SE
CORRE GRAN RIESGO DE QUE ESTAS MOTIVACIONES NEGATIVAS DOMINEN LA MENTE SI NO SE
MEDITA SOBRE ELLO.
ENTRANDO
AL NIVEL SUPREMO
Como
primer requisito para tener una mente pura y correcta, se debe generar la gran
compasión por todos los seres que sufren, y pensar que puedes ayudarles. Esta
gran compasión por los demás depende de un profundo conocimiento sobre las
experiencias indeseables y los sufrimientos del propio continuo mental. Y por
ello uno se adiestra primero en las practicas del nivel inferior, reflexionando
sobre las miserias que se experimentan en los reinos inferiores. De esta
contemplación surge una mente que desea la liberación de esa existencia tan
insatisfactoria.
Después
entra uno en las practicas intermedias, reflexionando sobre la naturaleza
transitoria de los gozos en los paraísos. De esta contemplación surge la
renuncia a todos los placeres materiales de la tierra.
Finalmente
pensando que todos los seres conscientes se enfrentan a todos estos
sufrimientos, que son los mismos que los nuestros, se genera el deseo de ver a
todas las personas liberadas de cualquier sufrimiento.
Este
fuerte deseo de compasión por los demás, genera el Amor, el Amor por todos sin
distinción, deseando su felicidad. Y como mejor medio para practicar con ellos
ese amor y esa compasión se genera la aspiración a la iluminación completa,
para poder ayudarlos a conseguirlo y además poder enseñarles cómo pueden
hacerlo por ellos mismos.
Aquí
recordamos a Jesús, quién enseñó el Amor a través del perdón, hay que aprender
a perdonar, es una de las practicas más difíciles, y a mí no me gusta nombrar
la palabra "difícil" es la primera vez y espero que la última que
digo que una práctica espiritual es difícil, pero reconozco la dificultad que
conlleva ésta, os recuerdo que Jesús tuvo que morir para dejar conciencia de
ello. Y siempre será recordada tanto su vida como su muerte perdonando a todos
sin distinción. No hay ecuanimidad sin perdón.
Cuando
hoy en día pensamos todos juntos las personas que se mueren todos los días del
año, que todos los días una parte de ellas se mueren de hambre, que todos los
días una parte de ellas son niños, que... que una gran parte de esas personas
mueren por violencia todos los días del año, y que ningún día del año pasa sin
que otro tanto de personas derramen lagrimas por ellos de sufrimiento, porque
todos ellos tienen familia. Y todos los días del año muchas personas se
preguntan: ¿Hasta cuándo?, ¿Tendrá esto arreglo?
Alguna
de las personas que está leyendo esta página puede estar llorando, otras, sin
embargo, sin llorar les duele el corazón, pero esta es una realidad que tenemos
en 1995, y si existe en este mismo siglo y en este mismo año, ¿Quién nos
asegura que dentro de 1995 años no siga existiendo esta realidad?
Si
no le ponemos remedio nosotros y ahora, el habitante de los países del primer
mundo (los ricos y los menos ricos) no le pondrá remedio nadie, porque siempre
existirá el discurso de que ya lo hará otro. ¡Tú eres ese otro!
El
conocimiento espiritual de las personas que habitan el primer mundo, que les
hace ver la luz, no es suficiente contra este gran desastre que hay en el
planeta tierra, se necesita la ayuda inmediata de los gobernantes, tanto
políticos como económicos, ellos también han de aprender a estudiar Dharma.
Hay
que poner en práctica este conocimiento, empezando por tu familia, después con
vecinos y amigos más cercanos, terminando en conjunción todos los seres de este
planeta a los que de verdad nos importa este grave problema.
Hoy
con los medios de comunicación no sería problema, si como mínimo, y como
principio, conectáramos una señal universal, la de pensar todos juntos durante
un minuto a la misma hora y todos los días del año que vamos a terminar con el
hambre en el mundo. Se generaría una causa y su efecto. Un efecto por supuesto
positivo, y además potencialmente dirigido a expandirse, este efecto generaría
en la sociedad la exigencia de poner una fecha para terminar con las muertes
por hambre del planeta.
Las
enseñanzas espirituales del Dharma se dividen en tres etapas, tres caminos, que
no se estudian por separado sino como practicas interrelacionadas. Lo
importante es no dejar de practicar, por poco que sea lo aprendido ponlo en práctica.
El Amor y el Perdón no se enseñan ni se aprende, se conocen en el camino, así
pues, ¡ponte en el camino!
Para
aquellos que haciendo el bien se han encontrado humillados, les digo que no
desesperen por ello, a lo largo del camino hay más Amor que odio, más Perdón
que venganza.
Y
por último diré a todos los que han visto la luz, que vuelvan a reflexionar
sobre ello, la segunda vez la luz se ve más clara, y también se ve más claro el
camino. Y este es el cometido del nivel supremo, acompañarte a recorrerlo.
¿PORQUÉ SE ENSEÑA TRES CAMINOS EN LUGAR
DE ENSEÑAR SOLO EL MÁS ELEVADO?
Para
que no se produzcan efectos erróneos en la mente del practicante, creando
complejos de superioridad y delirios de grandeza.
Aunque
la práctica de los caminos inferiores debe estudiarse antes que el tercer
camino, es útil desarrollar un interés en la mente pura desde el principio.
Porque
este interés es el que hace que las practicas inferiores se conviertan y
generen las causas para la práctica suprema: el altruismo universal.
Hay
que diferenciar las enseñanzas desde el prisma de lo que es teoría y lo que es práctica.
La
teoría sería todo aquello que podemos leer además de escuchar.
La
práctica será las experiencias propias que evidentemente no podrías haber leído
nunca, vivencias generadas al hilo de lo aprendido en las enseñanzas.
Dentro
de estas experiencias también estarán aquellas que solo las tendrás tú y que
son las que determinaran tu personalidad espiritual.
Se
empieza deseando tener compasión por los demás y uno mismo; se experimenta este
deseo practicando el Amor y el Perdón por los demás y uno mismo, y así se
genera la meditación sobre cómo es una mente pura y correcta.
MEDITAR LAS CUATRO NOBLES VERDADES
ESENCIAL PARA CULTIVAR EL DHARMA EN EL
CORAZÓN
La
doctrina de la vacuidad es tan basta como profunda y su comprensión proporciona
una gran confianza en las enseñanzas generales.
La
doctrina de la vacuidad también orienta sobre las dos metas espirituales
fundamentales:
- Un renacimiento superior en la
próxima vida.
- La suprema beatitud. (Este
estado tiene el conocimiento mental de Buda).
Las enseñanzas sobre esta suprema doctrina
se basan todas en la lógica y la razón. Su comprensión culmina con cualquiera
de estos dos estados:
- La liberación del Nirvana.
- La omnisciencia de la
iluminación.
Cuando estudiamos las enseñanzas superiores
y adquirimos su comprensión, analizamos cuidadosamente el razonamiento lógico,
contemplándolas con nuestras propias experiencias en la vida, obtenemos una
mayor confianza en nuestro propio conocimiento y se refuerza nuestra
personalidad espiritual.
Son nuestras reflexiones y nuestras
experiencias, y nuestros corazones se abren a las palabras de los maestros
iluminados.
El maestro está en disposición de enseñar y
el discípulo tiene el corazón abierto a cualquier entendimiento, éste es
premiado con generosidad con la doctrina de las cuatro nobles verdades,
imprescindible en cualquier método espiritual:
- La primera verdad es que
existe el sufrimiento. La existencia imperfecta está atrapada en el
sufrimiento.
- La segunda verdad es que el
sufrimiento es el efecto de una causa. Luego existe también la causa del
sufrimiento.
- La tercera verdad conoce la
causa del sufrimiento y ésta tiene remedio. Existe un estado capaz de
cesar el sufrimiento.
- La cuarta verdad nos dice que
existe un camino espiritual que conduce a este estado capaz de eliminar
el sufrimiento, y nos lo enseña, es el Dharma.
Estas verdades deben entenderse por su
orden de sucesión:
- De la causa del sufrimiento
surge la realidad del sufrimiento.
- De la causa de practicar el
camino espiritual surge la realidad de la cesación del sufrimiento.
Las dos primeras verdades describen el samsara
y el modo en que renacemos en él.
- La tercera se refiere a la paz
última.
- La cuarta se refiere al modo
de alcanzarla.
LA LEY DE LA VACUIDAD
El
hombre nace y muere, así pues, tiene la necesidad de meditar en su vida y
también en su muerte. La muerte no es simplemente que uno se evapora.
A
la muerte le sigue el renacimiento.
Éste
será feliz o miserable, superior o inferior según el estado de la mente a la
hora de morir.
Sí,
en ese instante crucial, nos mantenemos en vigilia, y predomina dentro del
marco positivo, del momento que se está viviendo por última vez. La mente será
clara, entonces podrá pensar en lo positivo del momento y olvidarse de lo
negativo. Podrá desear nacer en un lugar donde podrá servir de la mejor forma a
la especie humana. Podrá elegir su renacimiento.
Ya
hemos hablado de la mente sutil y la muy sutil, ésta es la que necesitamos en este
momento tan importante, y para ello es imprescindible tener clara como el agua
la ley de la vacuidad.
Existe
el momento contrario, en el que predomina el sufrimiento por culpa de la
ignorancia, las personas cercanas sufren tanto como el que se va a morir y el
ambiente entonces es negativo, no es por culpa de ellos, es por falta de
conocimiento espiritual, y por lo tanto no tienen verdaderas esperanzas, esas
que se convierten en alegrías cuando se sabe que después de la muerte física te
espera algo mejor que los simples gusanos.
Es
importante meditar sobre el estadio de la muerte, no se debe pensar que uno se
muere y ya está, debemos estar preparados para cuando llegue ese día, porque
llega sin avisar, y suerte tienen a los que avisa cuando llega (si están
preparados).
Cuando
se ha alcanzado el estado de la mente bodi, se ha entrado en el primer estadio
del camino Mahayana, el camino de la acumulación, generado éste estudiando la
quinta perfección que es la de la concentración.
Cuando
se alcanza el estado de unión del establecimiento de la calma y la visión
superior se alcanza el segundo estadio: el de la sabiduría.
Vacuidad
significa que el yo está vacuo, o vacío de existencia inherente, de existir por
sí mismo e independiente. Es el objeto de negación lo que se debe de negar.
Este estudio se esfuerza por hallar los puntos de contacto entre los distintos
estados de ser y buscar su armoniosa cooperación para permitir a cada uno
realizarse en el plano físico, intelectual y espiritual, y desempeñar
plenamente su papel en la sinfonía universal.
Los hombres de buena voluntad
perdidos en un mundo de falsos valores deben tener el conocimiento de que ha
existido y sigue existiendo una vía de la sabiduría, que es solo la búsqueda de
la comprensión de la naturaleza del mundo, y por lo tanto de nuestra propia
naturaleza y de la cooperación de la obra divina.
Quien la busque con
honestidad, podrá encontrar esta vía, pero es preciso poner en cuestión casi
todo lo que se considera como valores establecidos e ignorar todas las palabras
vacías de sentido, todos los eslóganes que hoy se consideran ideas o doctrinas.
Si
nos miramos en un espejo vemos que nuestra cara parece que existe dentro del
espejo, pero no está dentro del espejo, solo es una apariencia.
Esta
es nuestra forma de vernos en occidente, miramos el envoltorio sin darnos
cuenta de nuestra verdadera naturaleza, la cual no es el envoltorio sino lo que
hay dentro de él.
El
objeto principal de nuestra negación es la percepción de un yo que exista por
sí mismo, pues éste no existe sin depender de la imputación o de un nombre que
la mente está dando a este yo. No puede haber ninguna cosa que exista sin
depender de la imputación de la mente.
Para
conocernos verdaderamente debemos bajar hasta lo más profundo de nuestra nada,
hasta lo más profundo de nuestro ser.
En este lugar oscuro y vacío es donde
empezará a tomar forma nuestro verdadero yo, ¿cómo?, Creando, si creando,
primero le daremos luz a la oscuridad, así cuando le demos forma a nuestro yo,
será un yo pleno de luz, de conocimiento.
La nada es saber dónde estás,
Al saber dónde estás puedes estar en la
nada.
La nada es también una posible existencia.
Si sabes dónde estás y estas quieto,
Puedes entrar en el mundo del silencio
Donde verás y escucharás.
Nadie más verá o escuchará tu nada,
Estarás solo con tu secreto
Y sabrás quién eres.
La
verdad es una y la misma para todos, pero todos tenemos un nombre diferente
para nombrar la verdad.
Y
si la muerte es importante en nuestra meditación, tanto o más importante es
meditar sobre la vida.
Meditar
en un mundo mejor para ti y tu familia, generar verdaderos deseos de pensar en
un mundo mejor para todos los seres conscientes del planeta.
Lo
que es bueno para ti, como la felicidad, también es bueno para los demás, de hecho,
esta la buscamos todos sin excepción. Si los demás tienen felicidad pueden dar
felicidad.
La
visión del yo filosófico está algo distorsionada en occidente, tal vez esa gran
acumulación de familias separadas en las grandes ciudades, han provocado
también una separación espiritual que se pierde poco a poco de una generación a
otra.
Terminando
la meditación pensando en la gran familia que somos todos los seres humanos en
esta gran casa que es el planeta tierra.
Tal
vez, en una época en que mueren tantas personas de hambre, deberíamos ser sino
menos modernos, parar un poco la modernidad, por lo menos hasta que arreglemos
las más necesarias de las condiciones para sentirnos dignos, igual que
inteligentes.
Es
imposible entender la ley de la vacuidad si no se entiende esta base
fundamental de la ecuanimidad, el ponerse en el lugar de los demás.
En
la vacuidad tienes que ponerte precisamente en tu lugar dentro de la nada universal
de la imaginación, y cuando consigas ver a tu familia contigo, en paz y
felices, estarán también en el camino de Dharma.
Hay
una reflexión más profunda del yo dentro de la nada, pero, aunque importante no
debes obsesionarte con ella, es una reflexión filosófica, por lo que tarde o
temprano la aprenderás por propia experiencia.
Lo importante es practicar todo
lo que se ha aprendido, sin esperar a averiguarlo todo, todo es mucho, y
también puede ser mucho el tiempo que tardes en averiguarlo todo.
Por
lo pronto y primero, para continuar generando beneficios a ti y tu familia,
debéis obtener refugio en la unión familiar.
Esta
práctica generará beneficios a los demás seres conscientes también, si de
verdad los amáis.
CONOCER Y MEDITAR LA LEY DE CAUSA Y EFECTO
Con
el estudio de la vacuidad se adquiere la comprensión de cómo todas las personas
tienen un aferramiento innato a un yo que simplemente no existe. Este yo se nos
aparece como falso desde nuestro nacimiento, nuestro deber es averiguar su
verdadera naturaleza, ¡Nuestra propia naturaleza!
Esta
ignorancia que tenemos al nacer la seguiremos teniendo a lo largo de nuestra
existencia si no ponemos empeño en averiguarla. Y lo primero que debemos
considerar son las leyes kármicas, en las cuales estamos prisioneros.
Meditar
de esta manera nos lleva a conocer la existencia de una ley que controla tanto
la causa como el efecto de las consecuencias de nuestra existencia. Esta es la
ley de "Causa y Efecto".
En
nuestra vida diaria estamos creando, con nuestras acciones, causas positivas y
causas negativas, éstas tendrán efectos positivos y efectos negativos
respectivamente.
Estas
causas y efectos están regidas por las leyes kármicas, que a la vez están
regidas por nuestras acciones.
El
karma es un cúmulo de acciones heredadas de nuestra anterior vida, o
reencarnación. Si realizamos acciones positivas, al principio servirán para
purificar y limpiar nuestro karma de la negatividad acumulada anteriormente.
Recordar
que éstas negatividad son adquiridas por nuestra ignorancia hacia la sabiduría
espiritual, mientras no tenemos conocimiento espiritual no controlamos nuestras
acciones en el sentido correcto, el cual busca la perfección o realización como
persona.
Una
vez que limpiamos y purificamos nuestro karma, nuestras acciones positivas
darán frutos, ya sin el obstáculo del karma.
Si
practicamos el Amor y el Perdón mediante la generosidad todos los días sin
lugar a dudas se recibirá la misma generosidad más adelante, en su debido momento.
Así funcionan las leyes karmitas, protectoras de la ley de causa y efecto.
Si
entendemos esto, debemos abandonar toda actitud negativa en general, incluso en
pensamientos. Cuando nos damos cuenta que tenemos un mal pensamiento podemos
rectificar, y pedir perdón en pensamientos para acostumbrarnos a dejar de
tenerlos.
Debemos
dejar de pensar inmediatamente en acciones consideradas de alta negatividad:
Matar, robar, mentir, hablar con dureza sin necesidad, difamar a otros cuando
no están, entregarse a la charlatanería, tener malas intenciones en nuestros
pensamientos y actos, sostener pensamientos erróneos sobre nuestro apego al yo,
no perdonar y no ser generosos.
La
acción kármica más negativa es la de matar, ésta tiene los efectos más
negativos del karma, el destino final del causante sería morir antes de su
destino. "Si deseas vivir muchos años respeta la vida y no pienses
siquiera en matar".
El
karma tiene 4 características principales:
- Es un efecto creciente: La
bondad es precursora de una mayor bondad y el mal de un mayor mal.
- El karma es definitivo: si no
se remedia, tarde o temprano surge el efecto de la causa, o surge el gozo,
o surge el sufrimiento.
- Nunca se produce un efecto si
no se produce antes una causa: "hay que sembrar para recoger, no hay
nada que recoger sin siembra".
- Las semillas karmicas que se
establecen en la mente nunca pierden su potencial, pueden quedar
adormecidas hasta que un día aparezcan las condiciones que la activen.
Lo
primero que urge aprender y enseñar, cuales acciones son positivas para ser
cultivadas y cuales son negativas para ser abandonadas.
El
aprender para los mayores y el enseñar para los pequeños.
"No hay certidumbre de que después de
la muerte
no te espere un renacimiento inferior,
pero sí hay certeza de que el Dharma
y las tres joyas tienen
el poder de protegerte de él".
LA MOTIVACIÓN DE LA ILUMINACIÓN DE LA
BODICHITA
Con
todo lo sabido y estudiado, las enseñanzas del Dharma nos protegen de renacer
en algún reino inferior, y su ayuda hará que renazcamos en un reino superior.
Pero
en los mismos reinos superiores no estaremos completamente libres de
sufrimientos.
Cuando
meditamos los sufrimientos existentes también en los reinos superiores del samsara,
nuestra mente comienza a buscar, de un modo natural, un estado libre de toda
existencia cíclica.
Sustituyendo
el nivel de bondad mundano por la bondad nacida de la sabiduría transcendental,
se puede cortar las raíces de toda conducta sansarica compulsiva y entrar en la
gozosa serenidad del "nirvana".
Reflexionar
en los reinos superiores no te debe ser difícil si ya has llegado hasta aquí,
porque quiere decir que estás viviendo las consecuencias de ese reino superior,
así pues, solo tienes que analizar tu entorno.
Míralo
bien y verás que también hay existencia cíclica, ósea, que podrías renacer de nuevo,
pero siendo más rico, y si ya lo eres y vives como los dioses lo que te tocará
en tu nuevo renacimiento será descender de nuevo.
Lo
que quiero decir es que, si ya has entendido lo que es el sufrimiento, lo que
debes generar es la salida inmediata de todo renacimiento del samsara y buscar
la forma de entrar en la gozosa serenidad del nirvana.
La
frase. no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy, aquí significa no esperes
a morirte para hacer algo por tus semejantes, por la humanidad, lo que debas
hacer hazlo en esta vida. Si estás leyendo y entendiendo a la vez es que ya
tienes el renacimiento adecuado para alcanzar el nirvana, ahora necesitas suscitar
la motivación de la iluminación de la Bodichita en tu corazón y ésta generará
las causas para obtener la mente bodi.
El
mejor método para generar la mente bodi es la tradición oral de las seis causas
y un efecto:
- Ver a todos los seres
conscientes como a nuestra madre.
- Recordar el cariño y la
amabilidad con que tratan las madres a sus hijos y que así os han tratado.
- Esta visión y este recuerdo
crea el deseo de responder con cariño y amabilidad a todos los seres.
Este
deseo genera la 4ª y la 5ª causa: el amor y la Compasión, y estas son las
fuerzas de las que brota la sexta causa.
- Se caracteriza por una actitud
extraordinaria: el sentimiento de responsabilidad universal.
Esta
es la causa que madura finalmente como efecto: la mente bodi.
El
perfecto Amor y la perfecta compasión junto con la facilidad de perdonar sin
distinción, crean la suficiente energía positiva para crear una gran causa
positiva, y por lo tanto un gran efecto positivo.
Recordar
que hay que pensarlo y desearlo a la vez.
Pensar
que todas las personas pueden tener la felicidad y la causa que se la
proporciona, eso es amor.
Desear
que todas las personas puedan librarse de todos los sufrimientos y de las
causas que lo avivan, además es compasión.
Y
si das Amor y deseas seguir dando amor sin distinción perdonando a tus enemigos
y a cualquiera que te lo solicite, crearás la sexta causa y su efecto.
La
sexta causa es una dualidad y hay que entenderla como tal:
Además de ser una causa es también un
efecto.
El
efecto es una mente bodi y la causa de este efecto es una actitud
extraordinaria, y no hay actitud más extraordinaria que la de Buda.
Así
pues, la meditación, la disciplina y la práctica diaria de la ecuanimidad
tendrás que verla y enseñarla como un Buda, hay que practicar a ser Buda para
el día que lo seamos.
La
práctica siguiente a la de entender la ley de la ecuanimidad y haber meditado
en la ley de la vacuidad, está en tener claro el haber conseguido una
motivación para la iluminación de la Bodichita.
Primero
se tomará refugio y después se hará un sacrificio:
PROMETER
MANTENER SIEMPRE UNA ASPIRACIÓN ALTRUISTA PARA CON LA HUMANIDAD.
Esta
es la manera de generar la entrada a la gozosa serenidad del nirvana.
Con
este ejercicio cotidiano aprenderás a ser maestro, mientras eres discípulo,
serás tu maestro primero y tú debes ser tu primer alumno.
Si
aprendes a ser maestro conocerás su primera ley mediante la practica: La
humildad. La humildad ante los hombres se demuestra con el silencio, antes que
no decir nada cuando se habla, y cuando se habla hacerlo con:
HONESTIDAD
– SINCERIDAD Y AMABILIDAD.
No
estás estudiando una carrera cualquiera, estás estudiando espiritualidad, ésta
es la única que puede salvar a la humanidad de nuestro propio desprecio como
especie para no tener que avergonzarnos de las muertes diarias de niños y
mayores por hambre, por hambre, ¿acaso no le da vergüenza al primer mundo de
que ocurra esto en el siglo XX1?, No, tenéis razón los que estáis pensando que
no, por eso se está creando lo que se llama el 4º mundo en las grandes
ciudades: pasar hambre dentro del primer mundo.
Por
eso, el efecto de la práctica del amor y la compasión sin pedir nada a cambio
te abrirá las puertas de la reina generosidad.
¡Ahora
si estás practicando la enseñanza suprema!
"La
perfección de la generosidad es la gema mágica que satisface las esperanzas del
mundo". YE RIMPOYÉ.
TANTRA
Hay
cuatro grandes escuelas del Tíbet:
NIGMA
– SAKIA – KARGUIU – GUELUG.
La
naturaleza y finalidad de sus enseñanzas son las mismas en cada escuela.
Las
cuatro enseñan la totalidad de las practicas del "Hinayana" y del
"Mahayana" general como preliminares para entrar en el camino
secreto: VAJRAYANA.
Cuando
uno ha avanzado a través de los adiestramientos Sutrayana puede plantearse el
adoptar un método VAJRAYANA y así conocer el camino secreto del tantra. Hay una
visión cuatripartita del tantra:
KRIYA,
el tantra de la acción.
CHARYA,
el tantra de la ejecución.
YOGA,
o el tantra de la unión.
MAHAANUTARAYOGA,
los tantras del Gran Yoga Superior.
Estos
cuatro tantras se dividen en dos al clasificar a los tres primeros como tantras
inferiores.
El
tantra especifico que debemos practicar debe ser determinado analizando la
naturaleza y la disposición de nuestro cuerpo y mente. Hay que analizar el
grado de karma positivo obtenido, ósea el bagaje kármico, para saber hasta
cuanta cantidad de poder uno puede soportar.
Dentro
del tantra superior la naturaleza de los canales de energía de nuestro cuerpo,
los puntos místicos de presión, las energías vitales, los impulsos genéticos y
la propia personalidad espiritual adquirida con la práctica del Sutrayana son
factores importantes a tener en consideración
Estos
son temas que deben ser examinados con el propio maestro antes de adoptar un
método tántrico
CONSEJO TANTRICO
"NO ESTUDIAR TANTRA, EL TANTRA SE
PRACTICA".
Para
la introducción al verdadero tantra budista, es necesario un maestro de estas
categorías.
Pero
si no tenemos maestro, (esto lo digo porque en occidente hay mucho
autodidacta), podemos practicar tantra ¿ cómo?, Habiendo estudiado las
practicas del camino Hinayana, esto es: las tres joyas del dharma, la
ecuanimidad y vacuidad como leyes fundamentales del estudiante aspirante a la
iluminación y la generación de la motivación de la iluminación de la Bodichita
como energía fundamental para la generación de Amor, perdón y generosidad,
ahora hay que poner en práctica, mediante la experiencia personal, la compasión
por los demás a nivel universal.
La
propia experiencia mediante una actitud amable, educada y generosa de uno
mismo, generará los beneficios de una mente despierta. Por propia experiencia
te sentirás complemento del todo universal.
No
es necesario hacerse monje para conocer la verdad última y tampoco es necesario
conocer la verdad última para ayudarnos, pero es necesario saber que existe y
está dentro de ti el poder alcanzarla.
Citando
a Ye Rimpoyé:
"Medita
con concentración en un punto sobre la vacuidad que es como el espacio. Después
de la meditación contempla la vida como la creación de un mago. A través de la
familiarización con éstas dos prácticas, método y sabiduría, entran en perfecta
unidad y uno llega al termino de los caminos del Bodhisattva. Comprendiendo
esto, no te quedes satisfecho con un camino que exagera el método o la
sabiduría, ¡quédate en el camino de los afortunados!"
La
meditación última de las enseñanzas y primera de las practicas espirituales es
la meditación sobre la humildad y sencillez.
No
estás ejercitando dharma para ser un líder, estás ejercitando dharma para
unirte a una comunidad espiritual existente en el mundo entero, pero que la
mayoría no se conoce.
Esta
comunidad desea un mundo más justo y equitativo, y su lucha, además de las
propias de cada uno, estriba en el poder de una mente correcta, clara y
espiritual, cuanto más sean los que deseen un beneficio espiritual para este
complejo humano universal, más rápido llegaremos a ver los resultados de tener
una mente despierta.
La
verdad última no fue creada por los seres iluminados, ni tampoco surgió como
resultado de las actividades kármicas contaminadas de los seres samsaricos. La
verdadera base del mundo convencional es la verdad última de la vacuidad, ésta
nos enseña que no nos pertenecemos a nosotros mismos, pertenecemos a la unidad
de la creación universal.
Dentro
de la humanidad también pertenecemos a uno u otro bando, a los que destruyen la
naturaleza y solo ven al dios dinero, o al bando de la generosidad por
comprender la belleza de la naturaleza, y por lo tanto la belleza del ser
humano, ser humano con todas las virtudes es lo bello y la belleza última está
en la virtud de poder derramar generosidad, ésta es la cualidad última de
nuestra madre naturaleza: la generosidad repartida en los alimentos y demás regalos
que nos proporciona por el solo hecho de vivir aquí.
Si
no cuidamos a nuestra madre naturaleza, que es la que nos ha criado y nos está
criando todavía, ¿cómo poder asegurar una vida para las próximas generaciones?
Si cada día a la misma hora nos pusiéramos de acuerdo en meditar un minuto
pidiendo respeto y generosidad por los más necesitados, los beneficios de esta
concentración de mentes pidiendo todo el mismo deseo, serian otorgados por la
verdad última, sin lugar a dudas esto sería así, tal es la fuerza espiritual
del tantra.
Citando
a Lama Yeshe:
"El
poder ocasionado por las enseñanzas del dharma es inimaginable y diverso como
su calificativo, sin embargo, la utilización de este poder por los practicantes
del dharma es un obstáculo para la contemplación última de la iluminación.
Sí,
es verdad que el poder existe, pero éste solo se deja manejar para el amor y el
perdón, para la generosidad y la compasión. Un mal uso del poder adquirido al
practicar el dharma mediante el yoga y el tantra tiene un tiempo limitado,
terminado éste el espíritu se revelará al sentirse ofendido y el sufrimiento
será el castigo".
"No
es necesario hacerse monje en su sentido formal para poder utilizar las
técnicas del dharma. El propósito de las enseñanzas es, únicamente, el de
beneficiar a los seres conscientes... El mundo está necesitado profundamente de
paz, amor y compasión. Si el dharma puede contribuir a este logro nos
sentiremos felices de hacerlo. Todos juntos estamos en este planeta, todos
somos hermanos y hermanas con las mismas facultades físicas y mentales, los
mismos problemas y las mismas necesidades, todos debemos contribuir a la
realización del potencial humano y a la mejora de la calidad de vida tanto como
podamos... La humanidad está pidiendo ayuda a gritos. El nuestro es un tiempo
desesperado, aquellos que tengan algo que ofrecer deben responder a la llamada,
ahora es el momento".
"Cuando
analizamos los átomos de nuestro cuerpo, no podemos encontrar nada que sea el
yo. Normalmente nuestro ego, el ego de nuestra vida cotidiana, tiene la idea de
que existe de alguna manera como algo independiente; es como cuando nos miramos
y nos señalamos diciendo que esto es lo que somos nosotros. Este
reconocimiento, esta forma de interpretación, no existe. Este cero de existencia
es la no-dualidad, esto es la vacuidad".
"En
el hinduismo se explica que existe un principio creador de las situaciones de
deseo, de las situaciones del ego.
Al
meditar uno comprende que esto es la manifestación de un principio creador.
Este principio crea algo y luego se lo lleva.
Digamos
que este objeto está creando la causa principal o este principio.
Mientras
yo sea ignorante, el principio me crea un objeto deseado para polucionarme más.
Esta causa principal me produce más objetos de aversión.
Cuando
medito y comprendo que todas estas manifestaciones son creaciones de este
principio, entonces se la lleva".
En memoria al Venerable Lama Yeshe
nota:
Enseñanzas recogidas de sus libros:
Energía de la Sabiduría
Introducción al Tantra