El universo de las formas
Lo que Pitágoras quiso enseñar en el fondo era un conocimiento ascentral y lo hizo a través de la “Geometría en su medida”.
Y aprovechó para enseñar “filosofía”.
La filosofía enseña el lenguaje de nuestra mente. El filosofo enseña el “entendimiento” de ese lenguaje de las palabras.
Dentro de la palabra enseña “dialéctica”.
No cualquier dialéctica, la dialéctica filosófica. Ésta enseña a ver, además de lo lógico, que sería escuchar.
Esta Dialéctica no solo une y coordina las palabras por su sonido. También une y coordina las palabras a través de su “luz”.
Tanto el sonido como la Luz desarrollan un “tiempo”. Por ende el Tiempo se desarrolla en la “unión “del sonido y de la luz”.
La Unión del tiempo la explica Pitágoras en el mundo de las “formas”.
La primera figura que se podía realizar con los mínimos elementos era el triangulo.
Sumando a este un lado se podría abrir el triangulo hasta en infinito de lados siempre que los lados se alargasen en línea recta.
En ese supuesto se necesitaría un espacio infinito.
Y justo para explicar esto mismo, un punto en el espacio, creó un método para enseñar una dialéctica filosófica que debatiese el “ser”, que enseñaba a través del “circulo”.
Y el SER es debatido y constatada su existencia, nace la Ciencia Filosófica y los “maestros” que la enseñan.
El estudio de la física, con sus demostraciones, tiene una clara visión de la materia, como objeto y como forma. Y empieza a utilizar energía “mecánica” para mover la materia que hasta entonces parecía imposible de mover.
Tan clara que esta recogida en la ley general del universo.
Cuando rompen un punto sólido del universo hasta la extenuación encuentran energía, la seleccionan y encuentran alguna de las principales que rigen el universo.
Nace la formula de la energía.
La energía es el campo que produce la materia en movimiento.
A partir del estudio de la energía las matemáticas convencionales no eran suficientes.
Hubo de dar un giro atrás en el tiempo y volver a escuchar a los filósofos, de esta unión nace la metafísica.
Los griegos escribieron grandes tratados, mas es Platón su máximo exponente con su teoría de Las Ideas. Las generaciones llamadas neoplatónicas transmitieron después este conocimiento, La Hipóstasis. Y entonces si, con nuevas ecuaciones que den “supuestos” en formulas matemáticas se consigue atravesar la energía. Y hay más materia.
¿Encuentran lo que buscan? Si encuentran, el universo.
Con los últimos conocimientos la física, ahora que ven a través de la energía, no encuentra el ultimo eslabón de la materia, se les resiste a pesar de saber donde buscar... en la fuerza de la gravedad; esta es la misma fuerza que también se le resiste a la mecanica cuantica, y no quiere unirse a las otras 3 fuerzas, “primigenias asociadas”.
Si ser Lo UNO es ser también invisible, como quedó constatado en el pasado, si se llega a él, la prueba de que está es que no está. ¿Será eso lo que le pasa al gravitón?. Si fuese así ¿cambiaría la forma de pensar sobre Lo UNO?, ¿o se le llamaría gravitón a Lo UNO?.
Reconozco lo absurdo de la cuestión.
Pero es el infinito el que lleva de cabeza a la física de antes y a la física de ahora.
El estudio de la física ha llegado casi a la perfección en el conocimiento de la materia, ese punto en el universo, pero es conocer la formula del infinito la que hace viajar en el tiempo, y lo saben los físicos y metafísicos. Y también saben donde buscar, los números primos (Euclides).
Las matemáticas convencionales no entienden estos números, y a la vez los tienen localizados perfectamente.
El estudio de la Hipóstasis de Platón y Pitágoras conjunta, demuestra que la mente humana ve el universo entero como una “idea”, y es tan real como lo que “está viendo”.
“Si todo tiene forma todo tiene un lugar, quien no tenga Forma buscará una para ir al Lugar”
Chynotaw O’hara
No hay comentarios:
Publicar un comentario