domingo, 4 de noviembre de 2018

El universo en rotación, Chynotaw O´hara


La confirmación de un universo en rotación (C Sivaram), avalaría la teoría de la expulsión.
Una observación, que no solo se basa en la fuerza interior de una partícula, sino además tiene en cuenta su fuerza exterior, se encontrará con ésta.

Si ha encontrado la fuerza centrípeta y la fuerza centrífuga en una partícula, es posible que haya vislumbrado estas 2 fuerzas también en el comienzo del universo. 

Y serían las causantes de generar un espacio-tiempo circular desde el comienzo, coincidiendo con el universo en rotación de hoy que, considero queda plasmado en un papel (trabajo publicado) de C Sivaram, Indian Institute of Astrophysics, Bangalore, 560 034, India.

Si el comienzo del universo empieza con una expulsión, much force (no explosión) de energía pura (y ondas), y es obligada a seguir una dirección, ésta sería en espiral y hacia delante, en círculos (fuerza centrífuga) alrededor de la fuerza centrípeta que marca la dirección de la expulsión.

Sumando la fuerza centrífuga y centrípeta al modelo cosmológico, se obtiene la dinámica del cosmos, una ley para todos los participantes del cosmos:
Tendrán una dirección y se dirigirán a ella en círculos. De la misma manera cuando son atraídos por una gravedad también se moverán en círculos.

Pensando como Einstein, ¿Y si la singularidad de un agujero negro y un agujero blanco es la misma? ¿Y si la singularidad fuese una línea, en vez de un punto? Podría unir los 2 fenómenos.

La dinámica del cosmos solucionaría su visión de un agujero negro y un agujero blanco.
Este universo sería un agujero blanco, nacido de la expulsión de un agujero negro, y terminará absorbido por un agujero negro que creará la propia rotación del universo.

Así, La radiación de Hawking se referirá a un agujero negro, y la energía oscura hará referencia a un agujero blanco de Einstein. 

Estas radiaciones, desde lo más diminuto a lo más grande, del microcosmo al macrocosmo, sirven para detectar los 2 fenómenos, expulsión y absorción del cosmos. Los indicadores las mostrarían, probablemente, con ondas gravitacionales.
La medición lineal y geométrica de los 2 fenómenos, nos llevará a lo ya estudiado con la onda partícula, serán inseparables.

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